La Dra. Mª Nieves Martínez-Hidalgo, directora de la Fundación SoyComotu colabora en el programa de radio Mur y Cía en el espacio que cada lunes Onda Regional dedica a la psicología. Este lunes 6 de Febrero, Mª Nieves asistió al programa acompañada por el monitor del Taller de Cocina, Cultura e Inteligencia Gastronómica de la Fundación SoyComotu .
Mª Nieves quiso agradecer a Lola Martínez, a Marta Ferrero y al equipo de periodistas que conduce este fantástico magazine el trato y la atención dispensados a los alumnos y monitores del Taller de Radio, que visitaron la emisora la semana pasada, así como por su implicación en la normalización de los problemas de Salud Mental y en la lucha contra el estigma que sufren las personas que los padecen.
También recordó que el martes 7 de Febrero, se celebra el tercer cineforum del I Ciclo de la Psicología de la cooperación, donde se hablará acerca de la importancia de los medios de comunicación a través de la película “Lars y una chica de verdad”, dirigida por Craig Gillespie en 2007 y ejemplo de cómo la cooperación y el apoyo social y familiar son importantes para la recuperación de la salud mental de la persona.
Como muestra de este tipo de apoyo social, se dió a conocer en profundidad el Programa de Talleres Soycomotu® que la Fundación puso en marcha en el curso 2014/2015 y del que este año se implementa su tercera edición. En esta ocasión, fue el monitor de cocina quien explicó su experiencia como voluntario y monitor en el Taller de Cocina, Cultura e Inteligencia Gastronómica, comentando los conceptos, la filosofía y los valores de este taller.
El monitor del taller de cocina, inventor y recolector de palabras, sugirió el término inteligencia gastronómica para incluirlo en el nombre de su taller de cocina, pero, ¿Qué es exactamente la inteligencia gastronómica?
La Inteligencia Gastronómica es un concepto acuñado en el Taller de Cocina de la Fundación SoyComotu . Surge de la teoría de las Inteligencias múltiples de Howard Garner. Al igual que existen la inteligencia espacial, musical o emocional, nos planteamos que pueda existir un tipo de inteligencia que se manifiesta en la cocina y en la comida, en la elaboración de platos, en la detección y combinación de sabores y texturas y en la creación de nuevas recetas. Este concepto realmente surgió porque ninguno de los dos monitores del taller es cocinero profesional. Sentíamos que debíamos perderle el miedo a la cocina porque al final a todos los que hacemos el taller nos une el amor por la cocina y el placer por practicarla. Nuestra idea es que todos poseemos inteligencia gastronómica y la ponemos en práctica cada semana en el Aula Gastronómica del mercado de Verónicas. El uso de este acogedor espacio nos es cedido por el ayuntamiento de Murcia y la Concejal de Mercados, Doña Maruja Pelegrín, a la que queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento.
El monitor de cocina, como monitor es excepcional, pero además en el equipo de Mucho + que Voluntarios de la Fundación es considerado como un gran creativo y comunicador. En una reunión se le ocurrió el término de tribu osmótica para denominar el modelo que caracteriza la metodología implementada en los talleres de formación e inclusión social. ¿En qué consiste el Modelo de Tribu Osmótica?
La tribu osmótica es el ingrediente clave del taller y es un concepto que surge de la deformación profesional. Como químico conozco el principio de la ósmosis que es un proceso de intercambio de sustancias entre dos disoluciones. Esto es precisamente lo que ocurre en el Taller, ya que allí no hay clases magistrales. Todos aprendemos de todos en lo gastronómico y, más importante, en lo humano. El concepto de tribu deriva del significado del proverbio “Para educar a un niño hace falta toda la tribu”. El modelo de tribu osmótica contiene la esencia de ambos términos.
En estos encuentros que se realizan cada viernes de 6 a 8 de la tarde y en los que se convive entre fogones ¿Surgen conflictos? ¿Cómo es eso de personas con y sin problemas de salud mental?
A decir verdad, esto algo en lo que no pensamos cuando nos metemos en la cocina y empezamos a cocinar. Allí se diluyen las fronteras entre el sin y el con. Por supuesto que como facilitadores del taller, mi compañero Antonio Manuel y yo estamos muy atentos al bienestar y las necesidades de los participantes, pero llega un momento en que uno se abstrae del hecho de que haya personas con y sin, ya que todos aportan ideas en la cocina y nos cuentan experiencias y testimonios con los que aprendemos, nos divertimos y que nos hacen acabar la semana con una sonrisa en la cara.
Otro de los conceptos que dan nombre a este taller de cocina es la cultura, ¿qué tipos de recetas se cocinan en el taller?
Cualquier tipo de receta tiene cabida en el Taller. Sin ir más lejos, hace un par de semanas estuvieron los participantes del Taller de Radio en el Mercado de Verónicas y se cocinaron recetas raras, combinaciones arriesgadas de diversos sabores y texturas que el cocinero David de Jorge denomina como “guarrindongadas”. Entre ellas estaba el Sandwich Elvis, comida preferida del Rey del Rock, que hizo las delicias de los participantes en una tarde inolvidable de confidencias, sabores e interacción entre talleres.
Por otro lado, el hilo conductual de los contenidos incluidos en el temario del taller es el viaje a distintos países y culturas, concediéndose un papel especial a los gustos de los participantes y a la interculturalidad. A lo largo de estos años hemos tenido participantes de distintos países como Marruecos, Colombia, Bolivia o Guinea, que nos han dejado sus recetas en el Taller gracias al “Libro Viajero”, que cada semana pasaba por la casa de algún participante y recogía una receta, la mayoría de las veces con una historia personal y familiar detrás.
¿Por qué se apuntan las personas sin problemas de Salud Mental al taller? Esta es una pregunta que nos suelen formular con frecuencia. Realmente las personas sin problemas de salud mental se adscriben a este programa de talleres Soycomotu® y, son muchos los participantes que continúan varias ediciones en el Taller. Lo más importante que cualquier persona encuentra, tenga o no problemas, es un espacio donde convivir con respeto, tolerancia a la diversidad, cariño, cuidado y cohesión grupal.
A partir ahí, cada participante encuentra cosas diferentes. Las personas con problemas de salud mental encuentran un lugar donde pueden ser creativos, donde pueden aportar mucho y donde sienten que tienen un papel, lo que contribuye a que se empoderen y sean conscientes de que tienen muchas cualidades que les pueden ayudar a salir adelante. Encuentran muchas veces un punto de partida hacia unos estudios o profesión futura.
En muchos casos, lo participantes del taller son muy jóvenes y para ellos, aunque no tengan problemas diagnosticados, esta experiencia resulta muy enriquecedora porque les ayuda a salir de ellos mismos, a cultivar el compromiso y a enfrentarse a los prejuicios con los que tarde o temprano se van a encontrar y contra los que luchamos desde este Taller y desde la Fundación SoyComotu .
Realmente, lo bonito del Taller, es que todos encontramos algo, participantes, monitores, con y sin. En muchos casos, pasar por el taller supone cambiar nuestra visión de la realidad y nuestra vida para siempre.
