Un Lienzo de sueños
“El Funámbulo”
Por voluntario de la Fundación SoyComotu
“… Sobre un vacío absoluto un extravagante equilibrista inicia su solitario número: subsistir sobre una travesía lineal.
Arriba, encima de un eje de dos puntos, enfrenta su trágico destino, el mismo reservado para todos aquellos que, como él, creyeron que permanecerían para siempre en la Tierra de Nunca Jamás.
Aferrado a su pértiga, recuerda a lejanas figuras rupestres sin nombre. Las mismas que protagonizaron aquellos primeros dibujos animados que sobre estáticas páginas de piedra recorrieron el interior de la matriz a la caza de espíritus con los que alimentarse.
Nuestro hombre es diferente. A diferencia de aquellos, recorre el camino guiándose únicamente del impulso de su instinto, luchando por mantener su simetría sobre el espacio de volúmenes al que ha sido desterrado.
De ahí el cambio. La ligera lanzadera, con la que aquellos se cobraran las primeras piezas, ha sido sustituida por la pértiga poderosa con la que equilibra su irremediable fatalidad. Único seguro ante el precipicio, es su imperdible sobre el plano. Agarrado a ella, digo, camina pacientemente con su poderoso bastón sobre la soga de la que pende su suerte bajo sus pies.
Desde una óptica que no es la suya se evidencia su sino trágico. El que él ha elegido: Vagar en torno a un imperecedero cordón umbilical.
“Benditos Sean Los Pechos Que Te Amamantaron” dice la sura…”.
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