Por María Gutiérrez
Todos estamos preocupados y consternados por las alarmantes cartas dirigidas a varios políticos al inicio de la campaña electoral de la Comunidad de Madrid y desde la Fundación Soycomotu estamos de acuerdo en que se debe investigar a fondo. Pero de igual modo que denunciamos ese acto, no podemos pasar por alto el daño que los titulares de prensa están haciendo al colectivo de personas con diversidad en salud mental al proclamar que el autor de estos hechos es un “enfermo mental”, según varios medios de comunicación, sin haber contrastado esta información.
Estamos ante un claro ejemplo de cómo un uso incorrecto de información alimenta un ya más que generalizado estereotipo en nuestra sociedad: las personas con problemas de salud mental son violentas y agresivas. Existen varios estudios en los que se demuestra que sólo entre un 3 y un 5% de los actos violentos que ocurren en la comunidad son atribuibles a problemas de salud mental, siendo más numerosas las ocasiones en las que este colectivo es víctima de agresiones, malos tratos y abusos, que responsable de un acto violento; así lo relata la Confederación Salud Mental España en su denuncia por el tratamiento mediático que está realizando en torno a esta noticia.
Las personas con diversidad en salud mental tienen que luchar día a día con el estigma social asociado a su enfermedad, así como con el Autoestigma que se desarrolla en el momento en el que son conocedores de su diagnóstico. Que los medios de comunicación favorezcan al mantenimiento de este prejuicio en la sociedad no beneficia en absoluto a la recuperación de estas personas, así como tampoco ayuda en la alfabetización en salud mental que desde organizaciones del gremio llevamos a cabo.
Con motivo de este proceso de estigmatización, en 2018 la Confederación Salud Mental España publica Guía de Estilo sobre Salud Mental para Medios de Comunicación dirigido especialmente a profesionales de los medios de comunicación, para un trato mediático social, digno y responsable con los problemas de salud mental. Entre las buenas prácticas que esta guía recoge, se encuentran las Tres faltas de comunicación que en el Programa Educativo Soycomotu® compartimos con los alumnos de secundaria para que tomen conciencia del uso correcto e incorrecto a la hora de informar de un hecho.
Estas faltas son:
- El diagnóstico sustituye a la persona. En numerosas ocasiones observamos términos como “un grupo de enfermos mentales”, “un esquizofrénico”, etc. inundan titulares sustituyendo a términos más adecuados como persona o grupo de personas.
- Mencionar la salud mental del protagonista sin ser relevante. Es más común leer titulares como “Enfermo mental roba” que leer “un asmático roba”, de hecho, nos parecería ridículo encontrarnos este último ejemplo. Lamentablemente se sigue mencionando el estado de salud mental, aunque este no sea relevante ni aporte información a la noticia.
- Dar información errónea que perpetúa los prejuicios sobre los problemas de salud mental. En varias ocasiones, medios de comunicación han tenido que retractarse de información errónea aportada acerca de la salud mental de los protagonistas de las noticias, informando de que se trataba de una persona con problema de salud cuando en realidad no era así.
Las personas con diversidad en salud mental son por lo general un colectivo vulnerable y discriminado, con acciones de este tipo por parte de los medios de comunicación sólo se consigue afianzar ese maltrato y prejuicios por estas personas.