La tarde del pasado 12 de enero de 2018, el Taller de Fotografía y Fotoperiodismo Social Soycomotu® de la Fundación SoyComotu visitaron el Museo Hidráulico Los Molinos del Río.
Fue una tarde muy interesante, en la que los participantes pudieron adentrarse en el museo y descubrir la importancia de los molinos harineros para la huerta de Murcia y conocer su funcionamiento, a través de la exhibición que hay permanente de éstos. Además, disfrutaron de dos exposiciones temporales, enmarcadas en la programación del museo: “XII Concurso de Fotografía. Murcia, etnografía, cultura y tradiciones” y “Memoria del Agua”.
La exposición “XII Concurso de Fotografía. Murcia, etnografía, cultura y tradiciones“, constaba de las imágenes ganadoras divididas en tres modalidades (modalidad a. La huerta una construcción del hombre, modalidad b. Fotografía etnográfica actual y modalidad c. Fotografía histórica), gracias a las cuales los visitantes pudieron profundizar en nuestra cultura y tradiciones.
Con motivo de ésta, los participantes del taller pudieron detenerse en gran parte de las fotografías expuestas, analizando aspectos técnicos como la luz, el color o la composición y la importancia de éstos a la hora de querer transmitir una cosa u otra. Se creó un debate muy interesante y cálido entre los allí presentes.
La exposición “Memoria del agua” tenía como objetivo hacernos reflexionar sobre el agua, por su valor incalculable y limitado, además de hacer disfrutar de la belleza que se podía encontrar en cada dibujo, en cada fotografía donde este tesoro es protagonista. Constaba de 40 piezas de los fondos del Museo ABC. La muestra ofrecía, desde lo estético, una historia emotiva del agua.
Con motivo de esta exposición, cada participante del taller de fotografía se inspiró en una de las obras y escribió sobre ella.

Texto: José Antonio Oltra, participante del taller de fotografía
“Un día de otoño en la rivera del río”, inspirado en la obra del pintor Serafín Avendaño.
Un día de otoño en la rivera del río. Se puede observar que éste viene crecido, algo habitual en esta época del año.
La luz se refleja en el agua, haciendo de espejo, mientras que los árboles empiezan a perder sus hojas. La vegetación de la rivera es frondosa y da sentido a la frase “el agua, la vida”.
Este paisaje otoñal, es, a mi parecer, melancólico. Para mí, esta estación es bonita pero triste. Esto se ve reflejado en la foto, en la que los árboles han perdido sus hojas y se preparan para el frío invierno.

Texto: Marianela Molina, participante del taller de fotografía
“Pompas de jabón”, inspirado en la obra “Ilusiones”.
Tú siempre has estado ahí cargada de ilusiones como si fuesen creadas en una fábrica de pompas de jabón. Intactas, irrompibles que salen al exterior sin miedo a romperse y que consiguen llegar a lo más alto.
Yo en cambio me quedé rezagada en el tiempo intentándolo, jugando, entretenida con aquellas gotitas de agua y jabón que nunca salieron más allá del jardín porque por algún golpe de aire o suerte explotaban y caían al suelo. Pero nunca dejé de intentarlo y seguí jugando para ver hasta dónde podían llegar.
Quizá mis pompas de jabón nunca llegaron tan lejos porque mi risa no dejaba soplar para hacerlas perfectas y todo para mí era como un juego.
Quizá no tuve la suerte ni el valor de hacerlas como tú o simplemente no sabía cómo hacerlas, pero aún estoy aquí intentándolo de nuevo y disfrutando de las cosas como si el juego no hubiese terminado y si se rompen las burbujas !ya no me importa! Sé que puedo hacer más aunque no tarden en explotarme ni una milésima de segundo sobre la cara.
Cada uno tiene su propia fábrica de burbujas dentro esperando a ponerla en marcha, lo importante es que sepamos disfrutar con ello y poner toda la ilusión en cada una de esas burbujas y si se rompen estar dispuestos a seguir creando gotitas de agua y jabón mágicas en las que se reflejan como un espejo todo lo que llevamos dentro.

Texto: Hasnia Mehnane, participante del taller de fotografía.
“La cara oscura del mundo”, inspirado en la obra del dibujante Ángel Antonio Mingote
De esta imagen resaltaría el sin vivir continuo de las personas sin hogar; cuando hay lluvias, nieve o desastres naturales, ¿qué hacen?. No tienen un techo dónde resguardarse. Nadie hace nada por ellos.
En algunos países, ni siquiera tienen seguridad social, nadie se hace cargo de esta situación, caen enfermos, y parece no importarles a nadie. Están en la calle, pues nada, que se las apañen como puedan… Esta es una de las caras oscuras de esta sociedad capitalista.